domingo, 7 de abril de 2013

¿Por qué se nos "pegan" las canciones?

Hoy os traigo una reflexión, a raíz de una noticia de elmundo.es sobre cómo se nos "pegan" las canciones: ¿Tiene que ser la canción muy muy básica para que se nos "pegue"? ¿Qué factores intervienen?

Todos, desde niños, hemos sufrido en ocasiones invasiones por parte de canciones que no dejan de sonar de forma interna en nuestra cabeza. Pero... ¿Esto a qué es debido?
Por un lado, sabemos que cuanta más música escuchemos, más probabilidades tenemos de que esto nos ocurra. Mientras estamos hablando, en ocasiones ciertas palabras pueden traer una canción a la mente, comenzando a sonar y repetirse al tener asociada esa palabra a la canción.
Por ejemplo, si escuchamos a alguien hablando y de repente dice "cuéntame", quizás se nos venga a la cabeza la canción con el mismo nombre. Otro ejemplo podría ser si oímos parte de la canción "Gangnam Style". Esto puede pasar con muchas canciones. 

Gangnam Style, una de las últimas canciones más invasivas. ¿Por qué será?
Puede que sea por su sencillez, sus peculiares bailes... o simplemente porque es una de esas 
canciones que nos evoca recuerdos agradables y compartimos/cantamos con otras personas.

Por otro lado, según elmundo.es, si una persona continúa cantando mentalmente una canción que acaba de escuchar, es más probable que esa melodía vuelva a sonar en su cabeza en las siguientes 24 horas. Por eso canciones que escuchamos por primera vez con amigos en momentos agradables y que seguimos tarareando, las seguiremos teniendo en la cabeza en los siguientes días y semanas. No es de extrañar que canciones como las nombradas anteriormente aparezcan en las cabezas de muchas personas.

En tercer lugar, el uso que le estemos dando al cerebro mientras estamos escuchando cierta música también influye para que se repita o no. Según la misma fuente, tanto si el cerebro está realizando tareas de poco esfuerzo cognitivo o de "desafío", las canciones tienden a aparecer más, ya que el cerebro divaga (en el primer caso) o intenta buscar vías novedosas para solucionar la dificultad (en el segundo caso). Por tanto, se podría decir que tareas que requieran un esfuerzo cognitivo medio, disminuirán las apariciones de "canciones invasivas".

Todos estos descubrimientos, apuestan a que la música "podría ser una buena herramienta para examinar por qué aparecen determinados pensamientos no deseados y cómo controlarlos", ya que a través de la música es fácil iniciar canciones invasivas y manipularlas. Quizás para una persona con ansiedad por ejemplo, se podrían inducir canciones relajadas y positivas para convertirlas en invasivas y así reducir su ansiedad. La musicoterapia y la sonoterapia de hecho, a veces utiliza esta propiedad musical para crear o modificar estas canciones invasivas, aunque a veces lo haga de forma indirecta. 

We are the Champion es la canción más pegadiza de la historia 
según un estudio ¿Es posible que esta canción sea una canción 
especialmente invasiva para las personas de habla inglesa?


Aunque las canciones invasivas en un principio parezcan dañinas (invaden nuestro cerebro mientras estamos haciendo cualquier cosa), no siempre trae problemas, ya que nos pueden inducir sentimientos positivos, o incluso ayudarnos a aprender cosas. Con los niños, ésto se utiliza mucho, ya que comenzamos a enseñarles el mundo a través de canciones infantiles: Los animales y sus sonidos (en la granja de pepito), hábitos de higiene (pimpón es un muñeco), los números y las operaciones (yo tenía 10 perritos...), etc. Estas canciones, en ciertos momentos se pueden convertir en invasivas, pero por otro lado les sirven para aprender el mundo que les rodea, para socializarse (cantar con otros niños y con la familia), o simplemente como forma de comunicación. Ademas, también podemos utilizar esta propiedad invasiva de la música para estudiar. ¿Te imaginas lo sencillo que podría ser estudiar ciertos temas a través de canciones? ¿Y lo fácil que sería recordarlo año tras año?


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